VV. AA.
Si en América Latina las leyes destinadas a eliminar la corrupción; el clientelismo electoral; la discriminación racial o la violencia contra la mujer; a redistribuir los ingresos a los pobres o a proteger el medio ambiente efectivamente se cumplieran a lo largo del tiempo; las consecuencias sociales y políticas serían impactantes. En efecto; la distancia entre lo que imponen las normas escritas y lo que sucede en la práctica es un rasgo persistente en la región; que se ha vuelto más visible desde que los procesos de democratización; en los años ochenta del siglo XX; renovaron las demandas sociales e impulsaron la competencia política.A menudo se asume que la debilidad institucional que está detrás de esta brecha es una condición de fondo; una suerte de destino inscripto en el ADN político latinoamericano. En este libro original y persuasivo se argumenta todo lo contrario: la debilidad institucional suele ser una estrategia política; a la que pueden apelar tanto quienes gobiernan como quienes aspiran a llegar al poder. Así; los autores que sistematizan y condensan aquí sus largas trayectorias en el estudio de la debilidad institucional en la región analizan reglas que se diseñan para no aplicarse; o para que las cumplan algunos pero no otros; reglas políticamente atractivas para quienes las crean pero vetadas de hecho; en el terreno; por los responsables de aplicarlas; reglas creadas para no cumplirse ahora sino en el futuro; reglas que se aplican según la coalición en el poder o la capacidad de los actores sociales movilizados para apoyarlas o rechazarlas.En ese ajedrez político; que empieza en el diseño; sigue en la implementación y termina en el grado de cumplimiento de las normas; se juega buena parte de la calidad de la democracia en el continente; todavía acechada por una combinación de desigualdad; capacidad estatal disminuida y volatilidad política y económica. Al plantear con solidez conceptual y ejemplos concretos un modelo para identificar y comparar la debilidad institucional en la región; este libro quiere llamar la atención sobre una urgencia estructural. Como escriben los autores; tanto en el Norte como en el Sur; ninguna democracia puede funcionar bien sin instituciones fuertes.