MILLALEO, SALVADOR
La deuda histórica del estado chileno para con los pueblos indígenas, o primeros pueblos, es una historia conocida y padecida por todos ellos. Es una historia de abusos, usurpación, violencia, engaño, desconfianza, de promesas no cumplidas, de criminalización de sus justas luchas. La falta de reconocimiento de ese otro, y con ello la falta de respeto y atropello a su existencia y dignidad, imponiéndose el estado desde una afirmación violenta de dominación racial de lo chileno sobre lo indígena, en pleno siglo XXI, ha llegado a límites insospechados.
La revuelta social del 18 de octubre de 2019 ha girado el rumbo de esa sociedad en la que se había naturalizado el abuso en todas las esferas de la vida, y con ello ha abierto un nuevo ciclo de transformaciones impulsado por nuevos paradigmas, entre los cuales tenemos el necesario reconocimiento de la plurinacionalidad y de los derechos de los bienes naturales, entre otros. La historia del nuevo Chile comienza a escribirse en la diversidad, a través de los diecisiete Escaños Reservados que hacen parte de la Convención Constitucional.
Este ensayo busca aclarar el sentido de un cambio constitucional desde la plurinacionalidad, esclareciendo sus orígenes y contenidos; intentado ser un aporte a la vida común y a la premisa de igualdad al interior de un estado democrático y plural.