KEROUAC, JACK
Jack Kerouac y la naturaleza efímera de la existencia
Pese a la fama de aventurero creada por sus primeros libros, cuando el escritor descubrió el budismo más de una vez cambió a sus amigos por la soledad de una montaña, como el verano en que trabajó en Desolation Peak como guardabosques y se dedicó a meditar y escribir haikús, para luego huir del alcoholismo y la fama en la cabaña de Lawrence Ferlinghetti. Allí meditó, escribió la novela Big Sur y desarrolló un misticismo a la manera de Thoreau. Ahora se publica en Chile Dharma Pops, volumen que recoge buena parte de sus haikús.