ORREGO MATTE, HECTOR
¿Porqué este libro? Porque nunca antes había visto una declaración de incompetencia tan honesta y atinada - un acto de modestia y humildad en un medio en que descolla la soberbia y la vanidad. Confesar una derrota ante los seres que los humanos más queremos - nuestros propios hijos, no es cosa de todos los días, ni es cosa fácil. "Como habrás visto, a mi hijo en el fondo no le aconsejo nada. Respeto mucho a mi hijo para hacer una cosa así. Más bien le cuento los problemas que yo tuve para ubicarme en este mundo, trato de eliminar la autoridad del padre, del superego de hacerle ver que yo estoy tan perplejo frente al mundo como creo que está él".Tal vez secretamente espero un consejo de su mente más joven, más cercana al presente, con menos historia y menos prejuicios. Menos y más fáciles paradigmas diría Thomas Kuhn. Esa situación no ha cambiado. Si tú crees que a alguien le interesará leerlo, que alguien sonreirá al descubrir algo nuevo, que alguno se sentirá identificado, que otro se enojará, tomándome cariño u odio. Y -¡muy importante!- si alguien leerá el libro del principio al final, entonces, me encantaría que lo publicaras para despertar un placer, una emoción o una sonrisa a ese alguien que tomará este librito en sus manos . . . Quizás si todos los hombres maduros tuviéramos el coraje, la honestidad y también la generosidad de escribirles cartas así a nuestros hijos, cartas sin las vestiduras del prestigio o del poder paternal, entonces estaríamos caminando por la vía del entendimiento y del acuerdo hacia un mundo mejor.